Un sólido Instituto también abusó de un inexpresivo Vélez Sarsfield | OneFootball

Instituto venció a Vélez Sarsfield 2-0, en el estadio Juan Domingo Perón Monumental Alta Córdoba, por la tercera fecha del Torneo Apertura. El equipo cordobés sumó su segunda victoria, mientras que El Fortín, último campeón, no reacciona: perdió sus tres partidos y no anotó goles.

El contraste fue claro: el equipo de Pedro Troglio se mostró sólido, seguro, armado y con una línea de juego definida, mientras que el conjunto de Sebastián Domínguez (no pudo estar en el banco por haber sido suspendido por su fuerte discusión con el árbitro Andrés Merlos; en su lugar estuvieron sus ayudantes Nicolás Domínguez y Emiliano Papa) reiteró las carencias de sus dos presentaciones previas.

En un primer tiempo friccionado y cortado, Instituto insinuaba más. Y no extrañó que abriese la cuenta. Fue con un golazo: Gastón Lodico recibió un pase por elevación genial de Alex Luna y dentro del área, controló, avanzó, se acomodó y sacó un zurdazo bajo y perfecto, a los 43 minutos.

A poco de comenzado el segundo tiempo, La Gloria volvió a impactar. Damián Batallini, con todas las ventajas de una defensa estancada y anestesiada, definió, tirándose al piso, tras un tiro libre, a los 5 minutos.

Siguió manejando las acciones Instituto, ante un Vélez que era pura intrascendencia e impotencia. Tan negado está El Fortín este año que un tremendo golazo anotado por el juvenil Alvaro Montoro -el único jugador visitante que se salvó del aplazo- fue anulado por el VAR en una polémica decisión.

El pibe de 17 años realizó una carrera a pura velocidad, gambeta, con un caño incluido, y una definición espléndida. Pero en una parte de su jugada había sido derribado, cayó y ahí la pelota pegó (de manera casual y por la inercia de la caída) en su brazo, se levantó rápidamente y continuó su obra. La decisión fue anular el gol, sin cobrar la infracción.

Instituto se quedó con una merecidísima victoria y se instala entre los pretendientes a clasificar en la Zona B. Vélez, con un plantel debilitado y una nueva conducción técnica que no encuentra el rumbo, suma más preocupaciones para una temporada que no se presenta nada favorable.