Explota el caso Vinicius: su marcha en enero, más cerca | OneFootball

El brasileño no aguanta más. Se siente ninguneado por Xabi Alonso y ya estudia seriamente dejar el Real Madrid en el mercado invernal.

La tensión en el Santiago Bernabéu ha llegado a su punto más alto. Vinícius Júnior, cansado de ser sustituido y de perder protagonismo, empieza a ver su futuro lejos del club blanco. La opción de una salida en enero ya no es solo un rumor: es una posibilidad real que sacude los cimientos del madridismo.

El jugador siente que se le trata con injusticia. En el último encuentro, cuando parecía que recuperaba el ritmo con una segunda parte llena de chispa, volvió a ser sustituido. Había rozado el gol con un disparo al palo y encaraba a su marcador con éxito en cada acción. Todo cambió en la pausa de hidratación: en la banda esperaba Rodrygo para relevarlo. Sexto partido consecutivo sin acabar los noventa minutos.

El debate se trasladó a los medios. En El Chiringuito, Marcos Benito recordó que el brasileño genera un gol cada 80 minutos entre tantos y asistencias. “Muy pocos jugadores en LaLiga tienen esos números”, apuntó. Para él, la situación se ha vuelto insostenible: Vinícius no entiende qué más debe hacer para recuperar el estatus de estrella que tuvo el curso pasado.

Más allá de las estadísticas, hay un trasfondo de confianza. Xabi Alonso lo coloca al nivel de jóvenes como Franco Mastantuono, recién llegado con apenas 18 años. Esa comparación duele al delantero, que interpreta muchas decisiones como injustas. Tanto, que el rumor de una posible salida en enero ya está sobre la mesa. Si la dinámica no cambia, su futuro en el Madrid podría quedar sentenciado este mismo invierno o, como mucho, en verano.

En el vestuario, varios compañeros le han mostrado apoyo. Le animan a mantener la calma, trabajar duro y volver a su mejor versión. Nadie duda de su calidad, pero confían en la gestión del entrenador, que defiende un reparto de minutos para mantener frescos a sus atacantes.

Mientras tanto, la tensión crece. El madridismo se pregunta cuánto tiempo aguantará Vinícius en un papel secundario y si el club está dispuesto a arriesgarse a perder a una de sus grandes figuras.