Sin brillar, el Celta vuelve a ganar | OneFootball

El Celta de Vigo venció a domicilio por 1-2 al Levante UD, disputando 70 minutos con un futbolista más, para colocarse en mitad de tabla

Al igual que pasó en El Sadar, el Celta de Vigo logró sacar los 3 puntos como visitante, completando un partido a un nivel francamente mejorable, pero en el que tuvo el acierto necesario en ambas áreas -también la pizca de suerte- para conseguir dos victorias consecutivas en la competición liguera.

Claudio Giráldez desplegaba una alineación bastante reconocible y, para todos aquellos que cada 3 días jugáis a adivinar el 11 titular del Celta, una de las más «fáciles» para acertar de la temporada. Javi Rodríguez volvía a contar con minutos como titular en la línea de tres centrales y Carreira volvió a completar los 90 minutos y ya van ocho titularidades consecutivas.

En la medular, la mayor sorpresa sería la titularidad de Fran Beltrán junto a Ilaix Moriba, en un partido en el que, viendo los precedentes, era esperada la titularidad de Hugo Sotelo, quien entraría en el segundo tiempo. Por último, la línea de atacantes no presentaba ninguna sorpresa reseñable: Claudio Giráldez daba continuidad al trío Bryan Zaragoza-Borja Iglesias-Ferran Jutglà en Liga, reservando a Iago Aspas para el partido de Europa League.

Mingueza festejando su gol en el Ciutat de Valencia – Foto: Ivan Terron via Getty Images

La expulsión de Vencedor, un punto de inflexión en el partido

Si bien es cierto que, en Pamplona, el partido del Celta fue muy pobre en prácticamente todos los minutos, en el Ciutat de Valencia los vigueses sí mostraron bastantes minutos de calidad. Sorprendentemente, hasta el minuto 29, con la expulsión de Unai Vencedor, los de Giráldez fueron superiores a un Levante que no encontraba su sitio en el partido.

En cambio, con el cuadro granota con 10 futbolistas, el partido se volvió loco y el Celta perdió el control, algo que se vio agravado por el penalti que provocó Javi Rodríguez por manos en un córner. No obstante, la suerte se volvió a aliar con el Celta en los lanzamientos de penalti y, al igual que lo hizo Budimir en El Sadar, Etta Eyong erró su penalti.

Pocos minutos después del penalti errado por el Levante, el Celta de Vigo se puso por encima en el marcador gracias a un auténtico golazo de Mingueza desde la frontal del área a la salida de un saque de esquina, quien logró conectar un gran remate -eso sí, libre de marca- para perforar las telarañas de la portería del Ciutat de Valencia.

El Celta supo recibir el golpe para llevarse el partido

Tras el paso por el túnel de vestuarios, el Celta de Vigo -con uno más sobre el terreno de juego- no supo generar daño a un Levante que, a raíz del cambio al 4-4-2, puso en muchos apuros a los de Giráldez. Finalmente, los de Calero obtuvieron su premio a balón parado, gracias a una gran volea de Kevin Arriaga, de los más destacados del cuadro granota en el partido.

Sin embargo, tras recibir el gol de 1-1, el conjunto dirigido por el técnico porriñés reaccionó y volvió a ser dueño y señor del partido. El Celta de Vigo fue madurando el partido y, justo cuando parecía que la victoria no iba a llegar, apareció Miguel Román para enganchar un gran remate y darle los tres puntos a los suyos.

Precisamente, una de las claves de la victoria del Celta fue la madurez que está adquiriendo esta campaña. Mientras que, durante la temporada pasada, después de encajar gol, el Celta se hundía, este curso los de Giráldez están sabiendo reponerse a los golpes recibidos y contestar, y es precisamente lo que hizo en el Ciutat y lo que le permitió llevarse la victoria.

En dos partidos en los cuales el Celta no consiguió desplegar su mejor juego de manera consistente -de hecho, cuajando un pésimo partido en Pamplona-, los de Giráldez consiguieron sumar sus dos primeras victorias en LaLiga EA Sports de manera consecutiva y lejos de Balaídos, justo antes de enfrentar al FC Barcelona, a base de efectividad en las dos áreas. No obstante, los últimos encuentros dejan mucho margen de mejora a los celestes, aunque desde la victoria es sabido que se construye mucho mejor.

Bryan Zaragoza y Miguel Román festejando el 1-2 del Celta de Vigo – Foto: Ivan Terron via Getty Images

Lo más destacado del Celta ante el Levante

En la portería, Radu apareció con una grandísima parada para salvar al Celta de Vigo de encajar -en ese momento- el 1-0 de Etta Eyong, añadido a la gran seguridad que transmite en su área. Por parte de la línea defensiva, el cuadro celeste volvió a mostrar dudas, una buena muestra de ello fue la acción del penalti cometido por Javi Rodríguez, donde los celestes fallan por completo en las marcas individuales. Asimismo, la defensa celeste estuvo muy permisiva en el gol encajado, ya que Kevin Arriaga engancha la volea completamente solo, ante la pasiva mirada de los visitantes.

La medular, el lugar de mayor nivel celeste

Una vez más, Ilaix Moriba fue de los mejores futbolistas del partido y, en consecuencia, del Celta de Vigo. El guineano es un futbolista insultantemente superior en el aspecto físico, además de demostrar su grandísima calidad en el aspecto técnico. En la medular, fue sorprendente la ausencia de Hugo Sotelo en la alineación, en favor de un Fran Beltrán, que ya es el tercer futbolista que más partidos ha disputado en la historia del Celta.

Asimismo, en el medio del campo del conjunto vigués es obligatorio hacer una mención aparte a quien le dio la victoria a los celestes con su gol en el 91′, Miguel Román. En el quinto partido que disputa en esta campaña, el de Gondomar aprovechó la asistencia de Mingueza para, con un sensacional disparo desde la frontal, anotar su primer gol en LaLiga EA Sports.

Un ataque mejorado

Para terminar con el análisis individual, en ataque hay que aplaudir la confianza que Claudio Giráldez está depositando en Bryan Zaragoza, quien está creciendo con crecer en su estilo de juego y, en el Ciutat de Valencia, fue muy vertical y desequilibrante, lo que se espera de él en Vigo. Asimismo, otro futbolista al cual el de Porriño ha dado continuidad es Ferran Jutglà. Tras su doblete en El Sadar, el catalán fue titular y, aunque no vio puerta, dejó todo un recital de juego combinativo y de generar espacios en la defensa rival.