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Buenos días, queridos sufridores del parón de selecciones.

Si el oficio de portanalista es de por sí complicado (y siempre mejor ponderado que retribuido), resulta aún más difícil durante los interminables, tediosos e insoportables páramos de noticias relevantes en que se convierten los parones. En este sentido, como decíamos ayer, somos muniqueses desde “shequititos”. Las portadas se convierten en una selección de dimes y diretes, declaraciones insulsas, búsqueda de problemas inexistentes en el Real Madrid, portadas para deportes con menos aficionados y el hueco habitual en la sección de delitos culés, de la que ayer daba cuenta Sergio Yebra en su recopilación Miami y otros mil excesos permitidos.

Pues vale, Pau, “¡gñeeee!”, como diría Garabatxs. La parte inferior de la portada recoge la goleada de las nuestras en Champions, 6-2 frente a la Roma, lo que supone un arranque estupendo en la competición continental que esperamos se mantenga durante toda la temporada.

La portada del diario Marca no nos atrae mucho más, pese a que esté copada por madridistas y simpatizantes, como Jon Rahm, Carlitos Alcaraz y Pablo Barrios.

La portada de Marca se nos hace insulsa, pero hay gente del universo Marca a la que se puede aplicar casi cualquier calificativo excepto ese. Nos referimos a Pável Fernández.

Pável Fernández es un experimento, un constructo social, un ensayo clínico que está haciendo la redacción de Radio Marca para demostrar que es posible ganar clicks propalando cosas absurdas. El experimento del perro de Pavlov demostró el condicionamiento clásico, o cómo un impulso neutro (una campana) tras el cual llegaba la comida para el perro podía terminar generando la respuesta fisiológica natural (la salivación) solo con escuchar ese mismo timbre de la campana.

Pues bien. El experimento del perro de Pável-ov consiste en poner a un supuesto experto arbitral con filias azulgranas y alergia al Real Madrid a ver sus reacciones solo con el estímulo.

Azulgrana: todo correcto, sigan, sigan.

Blanco: grrrrr…

El objetivo del experimento es ganar interacciones, porque solo así se entiende que mantengan en nómina a un tipo que es capaz de cuestionar hasta el penalti más claro visto en los últimos meses, el que sufrió Rodrygo por la zancadilla de Kondogbia en el reciente Real Madrid-Olympique de Marsella, una penalti “sin discusión” hasta para el antimadridista Iturralde González:

“Vamos, perro de Pável-ov, es tu turno, demuestra lo que sabes”, dice un investigador desde la cabina de Radio Marca en la que observa al sujeto del experimento:

Ahí está. Regocijo máximo entre los investigadores: su mascota saliva ante el estímulo blanco. Este “experto” nunca pasó de pitar más allá de un Ponferradina-Cultural Leonesa, con todos los respetos para ambos equipos, pues su nivel era el de un Negreira-Reus, si tal partido entre el equipo que no pertenece al cuadruplicador de salarios del homónimo y el club a cuya quiebra contribuyó fuera posible. Este tipo se ha ganado cierta popularidad por el despelote que genera, por las críticas a su parcialidad, por las interacciones que logra (gran acierto de los buscadores de clickbait de su medio), pero ayer se superó, si es que tal cosa era posible. En su intento de defender el colectivo arbitral español, tan denostado en estas páginas por su nivel y por mantener a notables negreiros en sus filas, el perrito faldero del CTA Pável-ov escribió ayer:

Hasta el propio Alberola Rojas parece avergonzado por el tuit. “Is tin mili” que le van a dar un Islas Feroe-Montenegro. Toma ya, zasca en toda la boca para los que criticábamos que a los árbitros españoles no les daban partidos de nivel. “Toma, toma y requetetoma”, pronuncia Pável con sus habituales gruñidos. Montenegro, potencia mundial situada en el ranking FIFA en el puesto número 80, entre Gabón y Guinea:

“Supérame esto”. Pues vamos con el rival:

El ridículo es espantoso, pero ahí siguen algunos, porque han creado escuela, una escuela de defensores de lo Negreiro, con Iturralde González, Pérez Burrull, Andújar Oliver y este tipo en un clan cada vez más numeroso que copa todos los medios, cómplices necesarios para mantener este sistema podrido durante décadas.

El polaco Szczésny lo tiene claro: “El problema no es el sistema, es cómo actúas”. Parece que lo ha entendido a la perfección. El problema no es el reglamento, ni los límites salariales, ni el control económico, ni el régimen sancionador, el problema es cómo actúan tantos para saltárselos con la aquiescencia de todos los organismos relacionados con el deporte y la política. Todo vale. De hecho, el titular del diario Marca también parece relacionado con las habilidades laportianas: “El gran golpe”.

Se consuma el nuevo golpe al sistema con el partido de Miami y ,por otro lado, Joan Laporta se arrodilla, humilla y rebaja ante Al Khelaifi, Ceferin y demás mandamases del fútbol europeo para que lo acojan en su seno. Todo lo que está mal en el fútbol actual se dio cita ayer en Roma. Las carantoñas entre los presidentes del Negreirolona y el Qatar Saint Germain en el lanzamiento de la nueva EFC, que sustituye a la ECA, no provocaron sonrojo: Laporta ya traía ese color del baño.

Os dejamos con la portada del diario Sport, que titula Operación Ter Stegen con la misma euforia que en su día hablaron de Operación Salida u Operación Aubameyang.

Que paséis un gran día.