Mi Bundesliga
·31 de agosto de 2021
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·31 de agosto de 2021
Borussia Dortmund selló su mercado de fichajes de verano trayéndose a Marin Pongracic desde VfL Wolfsburg y la polémica se armó rápidamente.
Los problemas defensivos de BVB ya se han visto en las primeras jornadas de la Bundesliga y la exigencia de la afición llegó rápidamente. Mientras corrían rumores de mediocampistas y delanteros, nada se decía de la llegada de un defensor y los nervios picaban en punta. En un primer momento, sonó el nombre de Maxence Lacroix y, hasta incluso, el de Merih Demiral de Juventus, sin embargo, los problemas económicos del club produjeron que no se busque alguien de primer nivel.
Con la noticia, la afición negriamarilla explotó desconsolada y se ha visto más de algún chiste irónico. Y en cierto punto, algo de razón llevan. En este mercado de fichaje, han vendido por 107,7 millones de euros y solo han gastado en refuerzos 45 millones de euros. 30 de ellos, en Donyell Malen, quién lejos está de suplantar a Jadon Sancho, juega en la posición de Erling Haaland.
No solo sobran casi 63 millones de euros sino que la opinión popular cree que los gastos deberían haber sido en otras posiciones más necesarias. Como el lateral derecho donde Meunier y Passlack garantizan la autopista de la defensa en cada encuentro.
Como se ha contado, el croata ha tenido un mal contexto para llegar a Borussia Dortmund y esto se debe a que su nivel lejos está de ser malo. Antes de que Lacroix se haga con el puesto de titular con Los Lobos, Pongracic era el habitual en el once de Oliver Glasner y perdió su puesto solo por lesión. Su juego aéreo es muy destacado como, también, su ganancia en los duelos individuales.
La única mancha que tiene en su historial es su conducta fuera del campo de juego. En más de una ocasión lo han apercibido por violar la cuarentena y, justamente, por no cuidarse de la mejor manera ha tenido varias lesiones. Sin dudas que si miramos solo lo negativo, el fichaje no parece ser el mejor. Empero, en Dortmund se reencontrará con Marco Rose, quién le ha sacado mucho provecho en Salzburg, y con Erling Haaland, otro excompañero en Austria. Sí el entrenador negriamarillo logra ordenar su cabeza, el fichaje de Pongracic se convertirá en uno de los más infravalorados de los últimos tiempos.
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