MUNDO MILLOS
·17 de octubre de 2024
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Con muchos tropiezos en el primer tiempo que se volvió a regalar, pero con fortaleza para enfrentar el segundo, Millonarios por fin remontó un resultado y le ganó 2-1 a ‘Forta’ en el Campín.
Millonarios formó con Montero en el arco; Alfonzo, Llinás, el debut de Darwin Cortés y Arias en defensa; Vega, Charrupí, Ramírez, Córdoba y Mantilla en el medio; y Giordana en punta.
Cuando Millonarios había llegado con más peligro al arco norte del Campín, con remates desviados por los defensas de Fortaleza o el portero rival, llegó un contragolpe después de una de las enemil malas entregas de Charrupí, para que Santiago Córdoba de remate rastrero venciera a Montero.
¿El resto de la primera etapa? Atropelladas jugadas de Millos, un remate cruzado desviado de Córdoba y pare de contar. Las llegadas de Fortaleza eran mucho más punzantes y, al cierre de los primeros 45 minutos, una doble atajada de Álvaro salvó a Millonarios de irse doblegado en el marcador.
En el segundo tiempo Daniel Ruiz y Daniel Giraldo ingresaron por Charrupí y Cortés. Y además de la leve mejora en el ímpetu azul, Santiago Giordana fabricó la expulsión de Yesid Díaz, con Fortaleza pasando de la tranquilidad a la angustia y al aguante del marcador y la salida sacrificada del ex Millos Navarro.
A partir de allí, todo el partido fue de Millonarios que, angustiado, buscaba la paridad que llegaría al fin al minuto 68 tras un centro de Ruiz a Córdoba quien de cabeza venció por fin a Castillo. Con toda la hinchada empujando al equipo, llegó un golazo de cabeza del argentino Giordana que fue finalmente anulado por posición adelantada.
Jader Valencia volvió a tener minutos después de su lesión al remplazar a Alfonzo minutos antes de esa jugada invalidada. Y con dos delanteros y un relevo constante en la defensa que vio bailar a Stiven Vega por todas las posiciones de atrás, llegó al fin la recompensa. Un balón desde la izquierda le llegó a Llinás. El Mono, que ya había intentado cabecear varios balones aéreos, le punteó la pelota a Jhon Emerson. Y con un golazo ubicado sutilmente al palo derecho del arco sur el Campín explotó, en un grito de gol desaforado y un «Que lo vengan a ver, que lo vengan a ver…» a Juan Diego Castillo. Su maña fue inclementemente cobrada por los más de 20.000 asistentes al estadio.
En los últimos instantes del partido el susto pasó por un gol visitante, también anulado de forma correcta por posición irregular de Palacios. Después de las emociones típicas de un cierre frenético el pitazo final llegó. Y con fortaleza, por encima del fútbol claro y contundente, Millonarios ganó tres puntos vitales en su búsqueda de la clasificación. Independiente Santa Fe, el próximo escollo en Bogotá.
Carlos Martínez Rojas @ultrabogotano
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