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·5 de septiembre de 2025
El aura de Djokovic reta a Alcaraz

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·5 de septiembre de 2025
Serbio y español desatarán las hostilidades en la primera semifinal del US Open (21:00 en Movistar Plus). Nunca antes se han enfrentado en Nueva York. Nole lidera (5-3) el cara a cara.
Pese a la notable diferencia de edad, la rivalidad entre Djokovic y Alcaraz se ha convertido en toda una seña de identidad del circuito ATP. Balcánico e ibérico han malacostumbrado a los amantes a la fluorescente, librando batallas épicas (Wimbledon 2023, Cincinnati 2023 o la final olímpica en 2024) que quedarán en la posteridad. De hecho, cuando la semifinal de comienzo en la Arthur Ashe, Nole y Carlitos ya podrán contar a sus hijos que se enfrentaron en todos los grandes escenarios posibles: Open de Australia, Roland Garros, Wimbledon, JJOO, ATP Finals y finalmente, US Open. Conviene destacar que una de las pugnas más legendarias que ha dado este deporte, la que enfrentó en numerosas ocasiones a Nadal contra Federer, no puede decir lo mismo, ya que helvético y balear jamás se vieron las caras ni en Nueva York ni en los JJOO. Sí lo hicieron, sin excepciones, Nadal y Djokovic. Todo esto, por contextualizar.
Carlos Alcaraz y Novak Djokovic se saludan tras su último enfrentamiento en el Open de Australia | Imagen: Getty Images.
A priori, el favoritismo recae en la raqueta de Carlitos. Por dos simples razones: edad y momento de forma. El Prodigio de El Palmar ha dejado atrás las desconexiones, de hecho, ya suenan a tiempos pasados. Esta nueva versión del pentacampeón de Grand Slam, mucho más regular a la vez que apabullante, le ha permitido avanzar hasta la penúltima ronda en Flushing Meadows sin ceder un solo set. Su magia sigue encandilando al respetable, el problema para sus rivales, es que ahora viene acompañada de un instinto asesino que pocas veces se le había visto antes. El viejo Carlos molaba. El nuevo, asusta.
Ahora bien, Charli no debe bajar la guardia. Más que nada, porque enfrente tendrá a un oponente que huele la sangre como nadie. Nole Djokovic, que disputará su semifinal de Grand Slam número 53 (se dice pronto), tiene entre ceja y ceja el objetivo de aguar la fiesta a aquellos que esperan una nueva final entre Sinner y Alcaraz. «Todo el mundo está anticipando cada final entre ellos dos, así que intentaré estropear los planes de la mayoría de la gente», declaró el gigante de Belgrado tras derrotar a Fritz en cuartos de final. A su favor cuenta que los dos últimos precedentes (JJOO París y Open de Australia 2025) ante el murciano han caído de su lado. El cara a cara (5-3) también le favorece.
La gran duda que existe con Djokovic es más física que tenística. A sus 38 primaveras sigue demostrando que voluntad no le falta. No por nada ha alcanzado las semifinales en todos los Majors que se han jugado este curso. Su actual nivel le basta para superar al 90% del circuito, lo que no es garantía de éxito cuanto le toca medirse con los dos grandes cocos del circuito. En cualquier caso, la Arthur Ashe se prepara para una semifinal de altura.