El Real Madrid firma una remontada épica ante Olympiacos y se estrena en casa con victoria | OneFootball

Primer cuarto: dominio griego

Olympiacos arrancó con autoridad y castigó de inmediato la fragilidad blanca en el perímetro. Tyler Dorsey fue una pesadilla con sus penetraciones y aciertos desde fuera, liderando un parcial de 19–29 en el primer cuarto. El Madrid, con porcentajes muy bajos en el triple, no encontraba soluciones ofensivas y se vio obligado a remar desde temprano.

Segundo cuarto: reacción madridista

La historia cambió tras el paso por vestuarios. Scariolo ajustó la defensa y el equipo respondió: más intensidad atrás, mayor ritmo en ataque y un pabellón que empujaba con fuerza. Hezonja se encendió con varias canastas consecutivas y, poco después, Alberto Abalde puso por primera vez a los blancos por delante. El tercer cuarto, que se cerró 20-18, abrió la puerta a una batalla igualada hasta el final.

Un cierre con carácter

En el último periodo apareció la figura de Campazzo, que manejó los tiempos con 8 asistencias y acciones decisivas. Hezonja, autor de 18 puntos, siguió siendo la referencia ofensiva, mientras que Tavares (11 rebotes) impuso su ley en la pintura. El Madrid llegó a tener una ventaja de +7 en los instantes finales, con el público del WiZink encendido y rugiendo como factor clave. Olympiacos lo intentó desde el tiro libre, pero los blancos sentenciaron con un mate de Hezonja y el temple de Campazzo en la dirección.

El Real Madrid venció 89-77 en un estreno exigente, mostrando capacidad de sufrimiento y respuesta ante un rival duro. Una victoria que refuerza al equipo de Scariolo y que supone una declaración de intenciones en el arranque de la Euroliga más exigente de la historia.