El Tabloide Inglés
·4 de octubre de 2025
El United volvió a sonreír en casa: debut soñado de Lammens y nueva arma secreta de Amorim

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·4 de octubre de 2025
Con goles de Mason Mount y Benjamin Sesko, el Manchester United derrotó 2-0 al Sunderland en Old Trafford y sumó su tercera victoria consecutiva como local. El debut de Senne Lammens bajo los tres palos dejó muy buenas sensaciones, y los saques largos se convirtieron en la sorpresa táctica del fin de semana.
El Manchester United necesitaba ganar, y lo hizo. El equipo de Ruben Amorim se impuso con autoridad ante el Sunderland y volvió a dejar buenas señales en su estadio. Fue una noche sin sobresaltos, con un gol tempranero de Mount, otro de Sesko y un debut que ilusiona en el arco.
El resultado, además, sirve como bálsamo tras la caída frente al Brentford y mantiene a los Red Devils en la pelea: octavos en la tabla, empatados en puntos con el City y a solo cuatro del Tottenham.
La presión venía en aumento, pero Ruben Amorim volvió a sacar el pecho. El United se adelantó a los ocho minutos gracias a una gran jugada colectiva que Mason Mount definió con clase tras el pase de Bryan Mbeumo. A la media hora, Benjamin Sesko amplió la ventaja aprovechando un saque largo que desconcertó por completo a la defensa visitante.
Desde ahí, todo fue control y oficio. El Sunderland apenas inquietó con una jugada polémica antes del descanso, revisada y descartada por el VAR. El resto del partido fue manejado con autoridad por los locales, que no necesitaron pisar el acelerador para cerrar el triunfo.
Una de las curiosidades tácticas de esta Premier League ha sido el regreso del saque largo como recurso ofensivo. Y Amorim parece decidido a sumarse a la moda. Hasta esta fecha, el United apenas había intentado una veintena de saques de banda extendidos en toda la temporada pasada, sin conseguir goles.
Eso cambió este sábado. Dalot lanzó un misil directo al área, De Ligt peinó, Mukiele desvió sin querer y Sesko cazó la pelota para marcar el 2-0. Simple, efectivo y letal. Minutos después, otro saque del portugués volvió a generar caos en el área rival.
Amorim lo entendió: cuando no fluye el juego, hay que buscar caminos alternativos. Y los saques largos podrían ser esa herramienta inesperada que incline la balanza.
Si había dudas bajo el arco, Senne Lammens las despejó. El belga, fichado por 21 millones de euros desde el Royal Amberes, debutó con seguridad y temple, algo que no se veía hace rato en Old Trafford.
Tapó un remate complicado de Xhaka, controló otro intento en el cierre y hasta recibió una ovación del Stretford End tras quedarse con un centro aéreo. Puede parecer un gesto mínimo, pero en Manchester saben lo que cuesta tener un arquero confiable.
Todavía se lo notó algo nervioso en las salidas, lógico en su estreno, pero lo importante se cumplió: arco en cero por primera vez en toda la temporada. Buen comienzo.
El regreso de Mount al once titular fue otro acierto. Amorim lo mandó desde el arranque en lugar de Matheus Cunha, y el inglés respondió rápido: gol a los ocho minutos, despliegue, dinámica y conexión con Mbeumo.
Mount es uno de los preferidos del técnico portugués, aunque la llegada de refuerzos millonarios lo relegó a la banca. Pero actuaciones como esta le abren la puerta a más minutos. Su talento, movilidad y lectura de juego lo hacen difícil de ignorar.
El United visitará a Liverpool el próximo domingo 19 de octubre, en lo que será una verdadera prueba de carácter para los de Amorim. Ganar en Anfield nunca es tarea sencilla, pero el equipo llega con moral en alza, portería en cero y un nuevo recurso bajo el brazo: los saques largos, la jugada menos “glamorosa” del fútbol, pero quizás la más efectiva en este nuevo United.
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