Galán y Chingotto, una remontada única para soñar | OneFootball

Alejandro Galán y Fede Chingotto se llevan el Milán P1 para sumar su sexto título del año y aspirar, más que nunca, al trono mundial

De no creer. Cuando todo parecía perdido y Milán se encaminaba a un nuevo título de Agustín Tapia y Arturo Coello, llegó la sorpresa. Un giro radical, una vuelta de tuerca inesperada y una remontada heroica de Galán y Chingotto. Estaban tocando fondo, pero lo hicieron para resurgir. Para dominar como nunca antes y para adjudicarse un título que abre, por completo, la lucha por el número 1 mundial.

Sabían la oportunidad que tenían ante sí en la previa de un nuevo episodio del «Clásico» del pádel. Y, aunque parecía que no la iban a aprovechar, se juntaron los astros para regalarle al aficionado un fin de temporada cargado de emoción. Porque ahora, con su sexto título de la temporada en el bolsillo, se abre un nuevo escenario.

Uno en el que Alejandro Galán y Fede Chingotto pueden soñar despiertos con acabar 2025 en lo más alto del ranking. Un contexto en el que todo ese trabajo en la sombra y esas tardes amargas pueden tornar en la más absoluta y plena felicidad. Para lograrlo necesitan bordar la perfección y en Milán dieron muestras suficientes para creer en que ese sueño es una posibilidad real.

La resurrección de «Chingoland»

La final del Milán P1 arrancó con una versión de Tapia y Coello imparable. A los «Golden Boys» no había manera de frenarles y esa superioridad implacable estaba mermando seriamente a Galán y Chingotto. En el marcador, pero sobre todo en la parte mental. Apáticos, cabizbajos, como si hubieran aceptado revivir un final al que están acostumbrados.

Eran incapaces de ganar puntos, fallaban pelotas inexplicables… Estaban hundidos. Pero el contundente 6-2 en favor de Tapia-Coello que lucía el marcador al término del primer set fue combustible para ellos. Desde entonces, un torbellino de pádel que pilló por sorpresa a los número 1. El dominio cambió de lado de la pista y la superioridad que lucían unos cambió de bando.

Galán y Chingotto habían dejado atrás las dudas con un 6-3 que lo mandaba todo al set final. Y ahí, con todo el mundo pensando en la batalla que se avecinaba, los de Jorge Martínez tenían otros planes. Con un Chingotto imperial y con Galán en modo alien con su pegada, Tapia y Coello se esfumaban. El resultado habla por sí solo, un 6-0 incontestable, demoledor…

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¿Y ahora qué?

Con Milán volcado con «ChinGalán» y su épica remontada, el pádel mundial se ve ahora en una nueva tesitura. Quedan pocos torneos para el final de temporada, pero la lucha entre las dos mejores parejas promete ser única. Entre ambas duplas hay una diferencia de 2.080 puntos, pero esa brecha puede reducirse considerablemente en los próximos torneos.

Con Tapia y Coello renunciando a la prueba en Egipto, y con Galán y Chingotto presentes hasta en el FIP Platinum de Lyon, queda todavía mucha tela que cortar. Concretamente, hay en juego un total de 5.500 puntos que serán los encargados de dictar qué pareja acaba ocupando el trono del pádel masculino cuando la temporada baje definitivamente su telón.