El Sevillista
·20 de septiembre de 2024
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Xavier García Pimienta, se ha ganado en la noche de hoy viernes la antipatía de su propia afición, mostrándose inoperante de formar un equipo que pueda llegar a medio competir ante cualquier rival.
Un Alavés muy activo desde el inicio: "El Alavés se ha comportado como viene haciéndolo siempre. Es un equipo que gana duelos y segundas jugadas, es algo que habíamos advertido. Sabíamos de su potencial. Teníamos claro que, a nivel de juego, quizás podíamos hacerles daño, pero si no igualábamos el ganar duelos y segundas jugadas, ellos iban a estar por encima. Y así ha sido. En la primera parte, en ese sentido, nos han superado. Todos los duelos y segundas jugadas han sido para ellos. Han metido un gol, quizás podríamos haber hecho más porque es un saque de banda muy rápido. Incluso les han anulado otro gol. Al descanso, el resultado era corto para los méritos de un equipo y de otro. En la segunda parte hemos estado mejor, hemos estado cerca del empate en la jugada previa al 2-0. Luego, con el gol de Dodi (Lukebakio), sí que hemos estado los últimos diez minutos en el área rival, con posibilidades de empatar. Si no igualas en intensidad a un equipo, sea el que sea, lo tienes muy complicado".
Todo se comenzó a torcer desde el primer tiempo: "Por desgracia, la lesión de Isaac trastoca. Tiene que salir un compañero sin calentar y eso, quieras o no, trastoca los primeros minutos. Pero da igual. Creo que si hubiera estado Isaac en el campo la sensación hubiese sido la misma. En la segunda parte sí que hemos ido a por el partido. El descanso nos ha servido para, realmente, darnos cuenta de lo mal que lo estábamos haciendo nosotros y lo bien que lo estaba haciendo el Alavés. El equipo se ha puesto un poco las pilas y hemos estado más cerca de la portería contraria con juego y llegadas. Hemos estado muy cerca de conseguir el empate, en la jugada de Saúl. En la siguiente, creo que fue por no ganar un duelo, nos metieron el segundo gol y ya fue difícil. Es cierto que el equipo lo intentó hasta el final, con el gol de Dodi (Lukebakio) y llegadas desde fuera. Quizás no con muchas ocasiones, pero sí con llegadas. Podríamos haberlo empatado, pero era muy difícil porque quedaba poco tiempo".
Los ajustes durante el descanso: "El mensaje durante el descanso fue el mismo, lo mismo que habíamos trabajado, pero ganando duelos. Sabemos del potencial del Alavés, es un equipo honrado, trabajador y que lucha. Como digo, ha ganado duelos y segundas jugadas. Si no igualamos esa intensidad, ante cualquier equipo, es imposible ganar. Íbamos perdiendo 1-0 y ya era difícil. En la segunda parte sí que hemos corregido eso y hemos estado mucho más cerca de tener el balón y ganar duelos. Por lo tanto, se ha generado esa posibilidad de tener más el balón y en campo contrario. Estuvimos cerquita del gol del empate con la jugada de Saúl, pero el segundo gol de ellos es por otro duelo que no ganamos. Así es muy difícil. El equipo lo ha intentado hasta el final, pero ha sido muy difícil. El Alavés ha sido superior".
Una revancha el martes, ante el Valladolid en el Sánchez-Pizjuán: "No tiene nada que ver este partido con el siguiente. Sí es cierto que este nos tiene que servir de experiencia. Si nosotros no igualamos la intensidad con los rivales, no vamos a ganar. Es imposible. No hay ningún equipo que, si no iguala en intensidad al equipo contrario, tenga opciones de ganar. Nos va a servir, segurísimo, este partido. Si no igualamos el tea físico con los rivales y el tema duelos, no vamos a ganar a nadie. Nos va a servir. Naturalmente, el partido que viene es diferente. Jugamos en casa ante nuestra afición. Venimos de un golpe duro por perder y por cómo hemos perdido. Esto no puede volver a pasar. Nos tiene que servir para escarmentar, entre comillas, para entender que en cada partido hay que salir a darlo todo en cada momento".
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