DaleRojo
·14 de junho de 2025
Pase lo que pase, Alejandre Restrepo debe continuar en el DIM

In partnership with
Yahoo sportsDaleRojo
·14 de junho de 2025
Parce, estamos a un pasito, un suspiro, un pestañeo de meternos en la gran final del Fútbol Profesional Colombiano. Sí, el Poderoso de la Montaña tiene el camino clarito, con el pecho inflado y la moral por las nubes. Solo una tragedia al nivel de novela turca podría impedirnos pelear esa estrella tan anhelada. Pero esto es fútbol, y ya sabemos cómo es esa vuelta: un deporte tan loco que a veces no gana el que más merece, sino el que más aprovecha el momento.
Pero aquí entre nos, parce, ¡hay razones pa’ creer! Este equipo tiene huevo, corazón y cabeza. Y gran parte de eso es por el profe Alejandro Restrepo, que ha sabido leer el juego, entender el ADN del DIM y conectarse con la hinchada como hace rato no pasaba. El hombre no solo dirige, el hombre vibra con el equipo, lo siente, lo vive… y eso, hermano, no se puede soltar así de fácil.
A ver, familia poderosa, seamos claros: Restrepo se tiene que quedar, pase lo que pase. ¡Sí o sí! Si clasificamos a la final, que todo pinta pa’ que sí, brutal. Y si por esas cosas de la vida no se da, el proceso no se puede tirar a la basura. Porque esto no es flor de un día, esto es un proyecto serio que necesita continuidad pa’ crecer, pa’ fortalecer ese grupo que ya se ve compacto, comprometido y con hambre de gloria.
Recordemos, parceros, cómo estábamos antes de que llegara el profe. La cosa era una montaña rusa emocional, sin rumbo claro, con el corazón hecho trizas y el alma en veremos. Pero con Alejandro, el equipo se volvió competitivo, jodido para todos los rivales y con una identidad bien clara: intensidad, presión alta, posesión y valentía. Eso no se improvisa, eso se construye… y ya vamos por muy buen camino.
Ojo que no estamos diciendo que todo ha sido perfecto. Hay errores, claro. Hay cosas por mejorar, obvio. Pero aquí no se trata de tirar todo por la borda por un mal resultado. Se trata de tener visión, de pensar en grande y de entender que los procesos necesitan respaldo. Y más cuando el hincha, el verdadero, el que no abandona, siente que algo distinto se está cocinando en el camerino del DIM.
Así que, mi gente, dejemos los dramatismos. Este equipo está vivo, está fuerte y está cerca de algo grande. Pero pase lo que pase en la última fecha del cuadrangular, el profe Restrepo tiene que seguir siendo el capitán de este barco. Porque si algo nos ha enseñado este semestre es que cuando hay trabajo serio, cuando hay convicción y unión, el cielo es el límite. ¡Y nosotros no vinimos a ver estrellas… vinimos a ponernos una!
En conclusión, parceros, más que un técnico, Restrepo se ha convertido en una parte clave del alma poderosa. Y eso no se toca. Apoyémoslo, respaldemos el proceso y sigamos soñando con los pies en la tierra pero el corazón bien rojo. Porque como dice la vieja confiable: ¡con el Medellín hasta el fin!
¡Independiente Medellín regresó a su sede!
Ao vivo