Otro empate | OneFootball

Otro empate, o, lo que es lo mismo, otro fiasco. Otra oportunidad de recortar puntos a los de arriba desperdiciada, otra vez que no se gana de casa, otra vez que desperdicia una ventaja, otra vez que Lenglet la caga, otra vez que los centrales no están a la altura, otra vez que mirar al lateral izquierdo duele a los ojos, otra vez que se acaba el fin de semana con el gesto fruncido.

Fue en Balaídos, donde el Atleti empezó mandón, dispuesto a revertir la terrible racha a domicilio. Se adelantó, como ha es costumbre, con un jugadón de Barrios, que partió desde campo propio y asistió a Julián para que la empujara, aunque se le adelantó Startfelt para hacerlo en propia puerta. Ahí, el Atleti  no fue a por más, sino que esperó al contragolpe, y tuvo el segundo en un par de ocasiones, una muy clara de Hancko, que jugaba de lateral. Pero no llegó, como también ya es habitual y en el cuarenta, Lenglet cometió una falta ridícula en medio campo con una amarilla en el coleto. Soto Grado lo expulsó como un resorte. Parecía, pero no era, viendo la repetición y el criterio anterior y posterior del colegiado, esa amarilla, que provocaba la expulsión, fue una auténtica exageración.

VIGO, SPAIN – OCTOBER 05: Referee Cesar Soto shows a red card to Clement Lenglet of Atletico de Madrid after receiving a second yellow card during the LaLiga EA Sports match between RC Celta de Vigo and Atletico de Madrid at Estadio Abanca-Balaidos on October 05, 2025 in Vigo, Spain. (Photo by Jose Manuel Alvarez Rey/Getty Images)

La segunda parte el Atleti se afanó en guardar el resultado y lo llevaba más o menos bien, hasta que el Celta empató, vía Aspas en una jugada aislada. Ahí Simeone intentó, con poca convicción, la verdad, inyectar algún impulso ofensivo al equipo, y sacó a Galán del campo, a quien había metido tras el descanso, para meter a Baena, a Sorloth, había entrado también Gallagher y Nahuel. Pero la realidad es que el equipo no tenía piernas para atacar, bastante hacía con defenderse de la derrota. Y ahí todos nos preguntamos, ¿no deberíamos, incluso con diez, tener la posibilidad de al menos intentar ganar un partido contra el Celta de Vigo? Pero en esas terminó el partido y el domingo y creo que todos nos fuimos rápidos a la cama para olvidar el cierre de la semana y comenzar la próxima lo antes posible.